Corremos el riesgo de encontrarnos con la necesidad de tener que gestionar millones de residuos en unos años, cuando el parque de baterías de bicicletas y patinetes eléctricos se tenga que renovar. Así que mejor es afrontar ahora la situación para evitar el problema. Y eso es lo que están haciendo la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), Avaesen, Recyclia y Erion, además de varios ayuntamientos, en el marco del proyecto europeo Lions2Life.
El consorcio trabaja en darle una segunda vida a estas baterías, convirtiéndolas en una solución sostenible y rentable de almacenamiento de energía solar: una batería de litio de altas prestaciones, pero fabricada completamente a partir de baterías de litio recuperadas, aportadas por un conocido servicio de bicicletas eléctricas compartidas.
“Queremos mostrar a los ciudadanos que este tipo de soluciones de economía circular son posibles, que el uso de bicicletas y patinetes eléctricos es bueno para el medio ambiente y para el ahorro económico y de combustible, y que las baterías podrán usarse después para fabricar este tipo de soluciones”, aseguran los responsables del proyecto en la UPV. "Esta batería conectada a los paneles fotovoltaicos permite funcionar de forma autónoma con la energía del sol o ahorrar en el recibo de la luz", añaden. “Estamos entrando en un momento en el que tenemos que ser capaces de almacenar la energía del sol a un precio competitivo, reutilizando los materiales que son escasos si queremos hacer realidad la transición verde”.
No basta solo con ser competitivos
El consorcio ha presentado hoy las baterías en las instalaciones de La Pinada Lab en Valterna (Paterna), un centro conectado a un espacio de 250.000 m2 de bosque mediterráneo y pionero en la Comunidad Valenciana, enfocado a la innovación para las ciudades sostenibles. Las instalaciones de La Pinada Lab son completamente autónomas, gracias, precisamente, a la energía solar y a las baterías desarrolladas por Lions2Life.
“Desarrollar tecnología competitiva no es suficiente hoy en día”, afirman desde el equipo de Lions2Life, “es necesario, además, que dicha tecnología sea respetuosa con el medio ambiente, eficiente en el uso de recursos naturales y se integre como parte de un esquema de economía circular.”
En el proyecto, además de la UPV, participan Recyclia, uno de los principales agentes de gestión de residuos en España; la italiana Erion, la mayor gestora de residuos de su país; y Avaesen, que trabaja a través de su Think Tank Smart Cities con ayuntamientos como los de Quart de Poblet, Riba-roja, Paterna, Benidorm, Elda o Alcobendas, que han aportado su análisis sobre el estado en que se encuentran el autoconsumo, los vehículos eléctricos y el reciclaje de baterías.